Vivimos con la mirada puesta en el presente, en el día a día, como suele suceder, nos dejamos llevar por los impulsos mediáticos que nos manda la pantalla de tv o las ondas herzianas, esto hace que cada vez más seamos marionetas de quienes dicen ser informadores de la sociedad o mejor dicho la sociedad de la información.
En determinadas ocasiones las noticias son flor de un día, en otras, son pesadas repeticiones de lo mismo, las primeras suelen ser las que afectan a la sociedad, atentados, desastres naturales, accidentes de tráfico múltiples, asesinatos de mujeres.... las segundas suelen ser las que a los medios les dan portadas tras portadas, aquellas en las que inventan titulares alrededor de los bipartitos españoles.
La sociedad en la que vivimos se convierte, a pesar de ser la sociedad con más medios y capacidad informativa, en una sociedad alienada por los aconteciemientos marcados por los informadores.
Al final, todos seguimos la vereda marcada y nos olvidamos que existen caminos donde forjar nuestras propias noticias y nuestras propias opiniones.
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